**Debe dejarse en claro, sin embargo, que su decorosa actuación no debe entusiasmarlos al grado tal de pensar en ir más allá de exhibiciones. Por su edad ya no están para peleas en serio…
·Jesús Cova.- Las leyendas vivas del boxeo Mike Tyson y Roy Jones jr. ofrecieron mucho más de lo que podía esperarse de estos dos excampeones mundiales que cargan ya sobre sus hombros 54 y 51 años respectivamente, en la que se tradujo en una entretenida y sorpresivamente llamativa exhibición que brindaron en 8 rounds de 2 minutos c/u, el pasado 29 en el Staples Center de Los Ángeles, sede de los Lakers de la NBA, sin público por medidas de seguridad a causa del Covid-19, pero sí con la atención del mundo deportiva puesta en ellos a través de la TV.
Tyson le pasa la izquierda a Jones
Tanto el retorno al ring de ambos púgiles como la inesperada muerte del “crack” del fútbol Diego Armando Maradona el 25 del mes pasado y los violentos hechos que siguieron a su velatorio resultaron los sucesos de mayor sonoridad e importancia en el campo deportivo, en estos primeros once meses de este terrible año 2020 que-gracias al Creador-está por concluir.
En lo personal esperábamos mucho menos por parte de los dos: Tyson el más joven campeón mundial peso completo de la historia (ganó la faja CMB a los 20 años y 11 meses ante Trevor Berbick por KO2, el 22/11/86, esto es 6 días antes de cumplir los 21) y Jones Jr.,, también en los libros de récords como el único en 106 años del boxeo moderno que ciñó una corona del peso completo habiendo sido antes monarca mediano y rey supermediano, semicompleto (FIB,AMB,CMB) y en crucero- en esta división con el reconocimiento de una entidad poco conocida, la Unión Mundial de Boxeo-, quien no subía a un ensogado desde su revés el 8 de diciembre de hace dos años ante Scott Sigmon.
Tyson golpea al cuerpo a Jones
“Iron” Mike, por su parte, no se vestía de peleador desde el 11 de junio de hace 15 años y unos meses, ocasión en la que cayó frente a Ken McBride en 6 episodios. Esa última vez subió con 233 libras (105 kilos y fracción), 45 libras más (20 kg) que el peso dejado en la balanza para el retorno de hace tres días, en el que logró una bolsa de &10 millones que en plausible gesto donó para instituciones benéficas, prueba inequívoca de que no se puso los guantes de nuevo por apremios económicos, como suponían no pocos aficionados y la gente del boxeo.
Naturalmente, como es lo acostumbrado en toda exhibición, no hubo ganador. Los jueces Cristy Martin, excampeona mundial superwelter; Vinny Pazienzia, extitular superwelter y mediano y el exmonarca mundial semicompleto Chad Dowson, devolvieron las tarjetas con unas tablas que complacieron a todos y fallo que fue un justo premio a la demostración de los dos, con Tyson siempre al ataque (como hizo durante toda su carrera) y Jones en hábil defensiva, aunque debe anotarse que al final lució más agotado que su “adversario” tres años mayor y quien posiblemente vuelva al cuadrilátero en los primeros meses del año entrante.
A propósito de tal de tal intención, en este este punto hay que asentar, sin que vaya a entenderse como una contradicción con lo expresado previamente, que los dos deben reflexionar y refrenar su entusiasmo (hablaron de otra actuación) y olvidarse de peleas en serio. El almanaque es implacable. Ellos, definitivamente. Ya no están para esos trotes. Por allí apareció al día siguiente de la exhibición el también excampeón mundial Evander Holyfield, de 58 años, con un reto a Tyson (quien le arrancó una oreja de un mordisco en su segunda pelea, el 28/6/1997 en el MGM Grand de Las Vegas. Tyson fue descalificado en el tercero) exhortándolo a firmar un contrato para un tercer choque entre ambos…Por Dios.
Damos como un hecho que ninguna autoridad, de ninguna de las entidades que controlan el boxeo mundialmente, incurrirá en la insensatez de extenderles un permiso para combatir “de verdad, verdad”. Y presumimos que igual posición asumirán las comisiones estadales (de California, Nevada, New York, por ejemplo) y no darán el Visto Bueno que les permita pelear en serio, repetimos, Aun cuando no defraudaron y realmente rebasaron las expectativas en su exhibición de 16 minutos en el Staples Center californiano, lo prudente es que aplaquen sus bríos. Y sí, que vuelvan al ring de tanto en tanto para mantenerse en buena forma física, para divertirse y divertir a los aficionados y en especial para rememorar glorias lejanas.
33 y 21 años atrás…
Continuamos—ojo: sin el menor afán protagónico, pues los actores principales y únicos de esta extensa nota son Tyson y Jones–con un corto relato de dos vivencias personales que volvieron a la memoria mientras veíamos evolucionar a Tyson y a Jones jr, entre las cuerdas del Staples Center. “Sin querer queriendo”, decía El Chavo, regresaron los apagados recuerdos de 33 y 21 años atrás, los que en cierto modo nos ligan a las respectivas carreras de los dos gladiadores inmortales. Va de cuento:
A fines de julio de 1987, en la Convención Anual de la AMB en San José de Costa Rica, Gilberto Mendoza (q.e.p.d.), presidente de la entidad decana del boxeo mundial—que el ingeniero barquisimetano lideró por más de 33 años.– nos llamó a su habitación. “Quiero que vayas a Las Vegas —nos dijo de sopetón–, si no tienes problemas. Pelean Mike Tyson y Tony Tucker para unificar el título completo. José Sulaimán es el supervisor del Consejo, Bobby Lee el de la Federación Internacional y yo por la Asociación. No puedo ir pues la convención todavía no termina y la pelea es dentro de tres días, el jueves 1° de agosto. ¿Estarías dispuesto a ir en mi representación, como supervisor?”.
Highlights del regreso de Tyson y Jones.
El lunes 29 estábamos en el hotel Hilton de Las Vegas, Nevada, el escenario de la pelea que organizaba Don King y que era la última de una serie que dejó como finalistas a Tyson y a Tucker, campeones AMB y CMB el primero y el otro de la FIB.
Así, de manera fortuita, meramente casual, cumplimos con la misión encomendada por Gilberto, sin contratiempos gracias en buena medida al apoyo dado por Sulaiman, aliado en la posición de la AMB de impedir el reemplazo del juez venezolano Julio Roldán, pues la Comisión de Nevada pretendía poner tres jueces locales,
Tyson, de 21 años y 2 meses, bajó del ring con los tres cinturones después de apalear a Tucker, para una decisión de 116-112, 119.111 y 118-113 de los jueces Bill Graham, Phil Newman y Roldán, respectivamente.
Años más tarde, el sábado 5 de junio de 1999, nos hallábamos sentados ante una mesa como el juez AMB de la AMB al lado de Chuck Hasset y Paul Sita, del Consejo y la FIB para el combate de unificación entre Roy Jones, doble campeón mundial semipesado, y Reggie Johnson, de la Federación. Realmente fue una pelea desteñida, buena solo para el olvido en el Gran Casino de Biloxi, Misisipi (en inglés Mississipi) y que Jones ganó sin perder un asalto, con un triple 120-106 en las tres tarjetas, Lo único verdaderamente especial del programa fue la presencia de Michael Jordan, recibido con un estruendoso aplauso por el público que abarrotó el local. Un detalle inolvidable: en varios de los rounds, Jones se recostaba en los hombros de Johnson y le hablaba, casi a gritos, a un risueño Jordan, a un lado de la zona técnica, custodiado por 2 gigantescos guardaespaldas, para decirle que su actuación se la dedicaba a él.
Como en el cine: FIN.
· El periodista Jesús Cova está considerado como el maestro de la crónica boxística en Venezuela. Fue director de deportes del diario El Nacional. E s juez de la Asociación Mundial de Boxeo desde hace más de 20 años, exprofesor de Periodismo Informativo y de Opinión de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela y actualmente colaborador como columnista del diario deportivo Líder.