Hablar de las mejores épocas del boxeo, no se puede dejar de citar a uno de los más grandes promotores latinoamericanos de la historia y pionero de la internacionalización Rafito Cedeño, nacido en Maracaibo, Venezuela y llevó al trono mundial en sus respectivas divisiones a los púgiles venezolanos Luis “Lumumba” Estaba, Betulio González, Rafael Oronó y Carlos “El Morocho” Hernández.
Por otro lado, el “Gordo de Oro” como muchos le apodaban encumbró la carrera pugilística del colombiano José Antonio Cervantes “Kid Pambelé” quien llegó en dos oportunidades a ser uno de los más grandes campeones de los Jr. Welter.
La primera pelea de título mundial a 12 asaltos y que fue promovida por Rafito Cedeño fue la del venezolano Rafael Oronó en defensa de su título supermosca del Consejo Mundial de Boxeo, venciendo por K.O. en cuatro asaltos al panameño Pedro “Pellín” Romero.
Según anunció el diario El Universal, Cedeño también jugó beisbol y fue gerente de varios equipos, pero fue como promotor de boxeo donde tuvo un gran éxito. Como organizador de muchas veladas, Cedeño en varias temporadas fue premiado como Promotor del Año por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), cuyo presidente, el mexicano José Sulaimán, estuvo en Caracas en julio de 2001 para distinguirlo como Promotor Latinoamericano del Siglo.
Después vendrían la saga de campeón del mundo como el mosca Betulio González en aquellas riñas de oro contra el mexicano Miguel Canto o el chileno Martín Vargas a finales de los 70. La larga lista se completa con púgiles como Alfredo Marcano, Lumumba Estaba, Ernesto España, Vicente Paúl Rondón, Rafael Oronó, Fulgencio Obelmejías, Luis Primera, Jóvito Rengifo, Elio Díaz, Reinaldo Becerra, el dominicano Ray Meléndez y Carlos Gutiérrez, entre otros.
Cedeño, por culpa de la diabetes, se retiró de toda actividad y varias veces estuvo cerca de promover nuevamente a otros púgiles, pero su enfermedad le impidió volver a los escenarios, Sus últimos días los vivió en un ancianato; ya no era aquel voluminoso y polémico personaje que durante muchos años se mantuvo al frente de la promoción de espectáculos boxísticos en Venezuela.
Murió a los 74 años, víctima de un paro respiratorio en Caracas el día 21 de diciembre de 2006.
Rafito, odiado por muchos a quien representó, recibió en su lecho de enfermo, aquejado por graves quebrantos de salud desde hace varios años, el galardón que lo acreditaba como “Promotor del Siglo” para el Consejo Mundial de Boxeo (CMB)” para ello, Rafito Cedeño, fue trasladado al Hotel Meliá Caracas, donde fue recibido por José Sulaimán, quien después de los saludos de rigor y ya de manera formal, procedió a entregarle el galardón.
Entonces el periodista Irvin Guanipa escribió, “Rafito recibió muy emocionado su premio y dio muestras del rigor de la enfermedad que lo alejó de toda actividad del boxeo, luego de haber intentado un regreso, que no llegó a concretar por un despojo del que fue objeto”.
Cedeño junto a un funcionario dominicano y el boxeador Ray Meléndez en Santo Domingo.
Cedeño, nativo de Sinamaica, estado Zulia y residenciado por muchos años en Maracaibo, se desempeñó desde niño como becerrero en la finca de su familia. Incursionó en el comercio, como pelotero y hasta como gerente de los equipos de béisbol Espadón y Gavilanes; fue uno de los mejores promotores Latinoamericanos del boxeo.
Desde muy niño conoció al periodista y locutor José «Pepe» Atilio Leal, quien siempre lo iba a ver en los partidos de béisbol. Producto de esa amistad se convierte en su asistente en su agencia de publicidad. Gracias a este nuevo trabajo «Rafito» puedo ser partícipe de una gran hazaña que se vivía en todo el país, como fue la primera trasmisión de boxeo por radio desde Tailandia, entre el argentino Pascual Pérez y el tailandés Yoshio Shirai.
«Fue uno de los grandes cuando el boxeo estuvo en todo su esplendor, siempre soñador, persistente, tuvo una esencia como promotor para las peleas de boxeo, y además se atrevió a incursionar en el béisbol, los toros, la lucha libre y hasta en grandes empresas agropecuarias. Salió de lo más humilde hasta convertirse en una máquina de hacer dinero», manifestó Ángel Atilio Leal, promotor de la disciplina.
Cedeño, el mayor de siete hermanos, crea junto al locutor José Atilio Leal (su antiguo jefe) la empresa promotora Leal-Cedeño, donde se dan a conocer como promotores boxísticos. Una pelea organizada por Cedeño que quedó en el recuerdo fue la del zuliano Ramón Arias, al convertirse en el primer venezolano en disputar un título mundial, el 19 de abril de 1958 en el Nuevo Circo de Caracas, contra el argentino Pascual Pérez.
El «perdón» de Betulio
El excampeón mundial Betulio González consiguió dentro de la promoción del popular «Rafito» dos campeonatos mundiales. «Fue un hombre colaborador, buena gente dedicado en lo que realmente le gustaba; tal vez el querer sobreproteger sus ganancias lo hacían una persona llena de avaricia, pero con muy buenos sentimientos. No terminamos de la mejor manera, pero era una persona digna de admirar», dijo el triple campeón mundial mosca.
Recientemente falleció su hijo, Rafito Jr., quien lo acompañó en gran parte de sus actividades como promotor.
Rafito Cedeño pionero de la internacionalización del boxeo venezolano.