Prograis quedó listo para disputar faja superligero.
El estadounidense Regis Prograis se ganó la oportunidad de disputar el título mundial del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) luego de vencer por nocaut técnico a Tyrone McKenna, quien terminó con peligroso corte en el ojo derecho.
El combate fue fogoso y McKenna besó la lona en el segundo round en una gran presentación de Progreis hasta que terminó con las acciones en el sexto round.
Prograis estaba ganando la pelea, pero McKenna, fiel a su estilo, estaba mostrando mucho corazón y agallas, lo que reunió a sus fanáticos en el ringside.
Pero el médico decidió que su corte era demasiado severo y le dio la victoria, y una oportunidad a la corona del CMB que actualmente tiene Josh Taylor, a American Prograis.
“Es un hombre duro, sabía que iba a ser duro y cuando lo derribé, sabía que se levantaría”, dijo Prograis, ahora con marca de 27-1.
“Pero me quedé tranquilo. Siguió empujando hacia adelante y tuve que cambiar mi plan de juego y boxear más. He sido campeón mundial antes y lo seré nuevamente”.
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Un valiente McKenna, a pesar de sus afirmaciones previas a la pelea, admitió que Prograis tiene un gran poder.
“Es de clase mundial, tiene mano dura y es probablemente el golpeador más duro con el que he estado. Tiene un poder enorme”, dijo.
El presidente de Probellum, Richard Schaefer, estaba en primera fila en Dubái y dijo: “Ese fue un espectáculo increíble de Regis Prograis”.
“En mi opinión, es uno de los 10 mejores peleadores libra por libra, es uno de los mejores peleadores del mundo. Y Tyrone McKenna tiene que ser uno de los peleadores más duros que he visto”.
Prograis puso a McKenna de espaldas al comienzo del segundo round, con un volado de izquierda en auge, pero el irlandés, quien dice que le encanta ir a la guerra en el ring, le sonreía a su rival mientras yacía en la lona.
La sangre comenzó a correr por un lado de la cabeza de McKenna cuando el ex campeón mundial Prograis se apoderó firmemente de la eliminatoria final en el Dubai Duty Free Tennis Stadium.
El médico del ring inspeccionó a McKenna al final de la sesión y le permitió continuar y el “Mighty Celt” animó a sus fanáticos en el ring al intentar montar una pelea.
Prograis se mantuvo al mando, pero McKenna se negó a ser derrotado y disfrutó del éxito en el quinto asalto cuando el ritmo del estadounidense disminuyó.
Sin embargo, un corte desagradable sobre el ojo derecho de McKenna se abrió y obligó al árbitro a llamar al médico para que lo revisara.
Después de una inspección, se dictaminó que el valiente McKenna no estaba en condiciones de continuar y Prograis, quien llamó al nuevo fichaje de Probellum, Jack Catterall, después de la pelea, levantó el brazo.
Prograis quedó listo para disputar faja superligero.
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