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Las mejores peleas entre guerreros mexicanos

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Las mejores peleas entre guerreros mexicanos

Las mejores peleas entre guerreros mexicanos.


Rafael García.

México ha establecido dos fechas emblemáticas asociadas a sus fechas patrias con el boxeo. Una de ellas es la del 5 de mayo.

Sea propicia la ocasión para enviarle un fraterno saludo a toda la comunidad mexicana en conmemoración a la Batalla de Puebla y también para recordar las que muchos críticos consideran como las mejores peleas entre mexicanos.

He aquí la selección del relator Rafael García. De acuerdo o no, todos estos combates seleccionados son espectáculares.

12. José «Mantequilla» Nápoles TD 12 Armando Muñiz I – 29 de marzo de 1975

Cuando Nápoles huyó tanto de Cuba como de la desafortunada prohibición de Fidel Castro al boxeo profesional, encontró asilo en México y un público acogedor que supo reconocer el talento cuando lo vio.

Así, «Mantequilla» se convirtió en un mexicano honorario, acumulando popularidad en su nuevo hogar con combates contra rivales de la talla de Curtis Cokes, Emile Griffith, Hedgemon Lewis y Carlos Monzón, el último de los cuales fue un intento fallido de conquistar la corona del peso medio.

Cuando Nápoles regresó al peso welter para defender su corona, se encontró con un tal Armando Muñiz con un ferviente deseo de arrebatarle el cinturón.

Pero Armando se encontró con la angustia y la decepción en lugar de la gloria del boxeo, ya que vio cómo el árbitro detenía de forma polémica su primer combate con «Mantequilla» y, tras una breve charla en el ring con el presidente del CMB, José Sulaimán, se concedía una decisión técnica a Nápoles cuando Armando había dominado claramente la mayor parte del combate.

Por insultante y desagradable que fuera el resultado, desgraciadamente sería sólo la primera de varias decepciones que sufriría el talentoso Muñiz. Para el Napoles, supuso una llamada de atención de que su legendaria carrera se acercaba a su fin.


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11. Erik Morales KO 11 Daniel Zaragoza – 6 de septiembre de 1997.

Fue el clásico enfrentamiento: edad y experiencia contra juventud y talento en bruto. Zaragoza, de 39 años, era el canoso campeón del peso supergallo. Enfrente tenía a Erik Morales, una sensación de 21 años considerado el próximo gran púgil mexicano.

El combate se consideraba la fiesta de presentación de Morales, su primera oportunidad de ganar un título mundial y su presentación a los aficionados estadounidenses.

Los primeros asaltos fueron reñidos, pero en el cuarto una derecha salvaje del campeón aterrizó de lleno en la mandíbula del más joven, doblándole las rodillas. Pero Morales acabó haciéndose con el control, perdiendo poco a poco el respeto a la potencia del campeón y golpeando a Zaragoza con ganchos y uppercuts interiores.

En el undécimo asalto, Morales asestó un tremendo derechazo a la boca del estómago de Zaragoza, y la fuerza del golpe hizo que el viejo y orgulloso guerrero cayera de espaldas. Rodando hasta quedar sentado, Zaragoza sonrió y le hizo un gesto a Morales para felicitar a su vencedor y no se molestó en intentar superar la cuenta.

 10. Julio César Chávez TKO 8 Mario «Azabache» Martínez – 13 de septiembre de 1984

 Una vez más, el L.A. Forum acoge un enfrentamiento totalmente mexicano, esta vez en vísperas del fin de semana de la Independencia de México.

El «Azabache» Martínez, de diecinueve años de edad, con la moral por las nubes tras sus impresionantes victorias sobre Donny Brooks y el ex campeón Rolando Navarrete, tiene la oportunidad de conseguir el cinturón de peso superpluma que Héctor Camacho había dejado vacante recientemente.


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Chávez y Azabache.

Los aficionados mexicanos están impacientes por ver coronarse a Martínez, pero en su camino se interpone el entonces desconocido Chávez, de 21 años. Durante la mayor parte de los ocho asaltos, Julio golpeó sin piedad a un luchador pero ensangrentado -y finalmente superado- Martínez en un combate brutal.

El resultado final fue una victoria por nocaut, el primero de los seis títulos mundiales de Chávez, y el nacimiento de una leyenda. El mundo del boxeo se alegró de haber descubierto al próximo gran púgil mexicano.

 9. Carlos Palomino TKO 15 Armando Muñiz I – 21 de enero de 1977

Poster Palomino-Muñiz.


Palomino llegó a su primer enfrentamiento con Muñiz (por cierto, la primera pelea de título mundial entre graduados universitarios) como campeón del peso wélter tras vencer unos meses antes al británico John Stracey, quien a su vez había destronado al gran Nápoles. Muñiz, por su parte, optaba por tercera vez al título, tras haber caído dos veces ante el mismo Nápoles.

Debido en gran parte a las actuaciones de Armando contra «Mantequilla» -especialmente en su primer combate-, la afición del aspirante había aumentado considerablemente, y sus seguidores esperaban que se hiciera con el título mundial en su tercer intento. Pero tras catorce asaltos muy reñidos y muy violentos, Palomino tomó el mando en el decimoquinto y obtuvo una dramática victoria por nocaut.

8. Lupe Pintor SD 15 Carlos Zárate- 3 de junio de 1979:

En 1979 Carlos Zárate disfrutaba de la adulación de sus compatriotas como el mejor peso gallo del mundo. En México asistía a fiestas repletas de celebridades y políticos, mientras que en Estados Unidos peleaba duro y a menudo, ganando cheques del tamaño de los que nunca soñó cuando era un niño en las calles de su empobrecido barrio de Tepito.

Tras una dolorosa derrota ante Wilfredo Gómez, Zárate volvió a su categoría de peso preferida para enfrentarse a Lupe Pintor, antiguo compañero de gimnasio y aspirante en ascenso.

Disputado en el Caesars Palace, el combate entre Zárate y Pintor sigue considerándose una prueba de Rorschach para los aficionados al boxeo: los partidarios de la pegada limpia y nítida creen que Zárate se ganó la victoria que los jueces concedieron al más ocupado, pero menos eficaz, Pintor.

En aquel momento, muchos creyeron que el resultado era un robo evidente, y la derrota precipitó a Zárate en una espiral de endeudamiento y drogadicción de la que tardó años en salir.

Para Pintor, fue el comienzo de una carrera en el campeonato que estaría llena de drama, emoción e incluso tragedia.


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 7. Juan Manuel Márquez UD 12 Marco Antonio Barrera – 17 de marzo de 2007

Barrera defendió por quinta vez el título superpluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) que adquirió en su combate de goma con Erik Morales contra Juan Manuel Márquez en el Mandalay Bay de Las Vegas. Márquez, que tres años antes se había recuperado de forma asombrosa de tres derribos en el primer asalto para un disputado empate con Manny Pacquiao, llevaba dos combates tras una dudosa derrota por puntos ante Chris John y necesitaba imperiosamente una victoria de firma.

«Dinamita» aprovechó al máximo la oportunidad contra el envejecido pero más popular Barrera, mostrando un estilo más ofensivo de lo habitual, yendo mano a mano con el «Asesino Cara de Bebé».

El combate entre Barrera y Márquez, técnico y violento a partes iguales, se convirtió en un festival de combinaciones llamativas y puñetazos despiadados en la que sería la última gran actuación de Barrera.

El árbitro Jay Nady ni siquiera vio un derribo de Barrera, pero sancionó a Marco por golpear a Márquez cuando estaba en el suelo.

Al final de la noche, el error del árbitro no influyó en el resultado, ya que, sorprendentemente, los tres jueces dieron la victoria a Márquez por una cómoda decisión en lo que muchos espectadores consideraron un combate demasiado reñido.


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 6. Marco Antonio Barrera MD 12 Erik Morales – 27 de noviembre de 2004

Después de dos encuentros dramáticamente reñidos, Morales y Barrera se reunieron en el MGM Grand de Las Vegas para una pelea trilogía. Morales llegó como el ligero favorito, ya que algunos estaban profundamente preocupados por el declive de Barrera, ya que se sometió a una cirugía cerebral después de su revancha con Morales y fue detenido por Manny Pacquiao en 2003.

Un combatazo la Morales-Barrera 3


A pesar de todo, los aficionados acudieron en masa al combate, cautivados por la promesa de acción sin tregua, y los dos orgullosos guerreros mexicanos cumplieron. La que se convertiría en la Pelea del Año 2004 ofreció un encuentro feroz y un centelleante undécimo asalto que se convirtió en los tres mejores minutos de combate de aquel año. Al final, Barrera salió victorioso por decisión mayoritaria, poniendo fin a una de las mayores rivalidades de la historia reciente del boxeo.

 5. Rafael Herrera KO 8 Rubén Olivares – 19 de marzo de 1972

Ex seminarista y aspirante a futbolista, Rafael Herrera no estaría en la lista de candidatos para destronar a uno de los campeones más pegadores de su época. Sin embargo, ante un público alborotado en el Toreo de Cuatro Caminos de Ciudad de México, Herrera no sólo destronó a Puas: increíblemente, le propinó una paliza.

Sin mostrar ningún respeto por Olivares, que en aquel momento había disputado más de setenta combates profesionales y sólo había perdido una vez, Rafael se abalanzó sobre él desde el principio, abriendo un corte sobre el ojo derecho de Puas en el sexto, y ganándose un nocaut de infarto con un hermoso derechazo en el octavo.

Aunque Olivares achacaría posteriormente su sorprendente derrota a problemas de peso, lo cierto es que el triunfo de Herrera cerró una era en el boxeo mexicano. Olivares -quizá el mejor púgil mexicano hasta ese momento- seguiría luchando durante más de quince años tras la derrota ante Herrera, pero no cabe duda de que aquella noche perdió mucho más que su título.


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4. Carlos Zárate TKO 4 Alfonso Zamora – 23 de abril de 1977

En 1977 los dos mejores boxeadores de la división de peso gallo eran tremendos pegadores, ambos invictos, ambos campeones y ambos nativos de la Ciudad de México.

Un enfrentamiento era inevitable entre estos dos amigos y antiguos compañeros de entrenamiento; aún más, era un combate que todo el mundo sabía que no podría llegar a la distancia dada la ventaja de los puños de Carlos ‘Cañas’ Zárate y Alfonso ‘El Toro’ Zamora, sus récords combinados para un fenomenal 72 nocauts en 73 peleas.

Pelea decepcionante para Zárate.

Frente a una fuerte presencia policial para hacer frente a un público alborotado, y a pesar de la intrusión en mitad del combate de un espectador en gran parte sin ropa, Zárate vs Zamora ofreció lo que todos habían venido a ver, a saber, una guerra brutal.

Tras cuatro asaltos caóticos y dos derribos, una ráfaga de duros golpes de Zárate dejó a Zamora desplomado bajo las cuerdas, coronando de hecho a «El Toro» como el peso gallo más temible de su época y convirtiéndole en una auténtica superestrella del boxeo latino.

3. Israel Vázquez SD 12 Rafael Márquez III – 1 de marzo de 2008

Cuando llegó marzo de 2008, Vázquez y Márquez ya se habían pasado un cinturón de título mundial en peleas consecutivas. En el primer combate, Vázquez se retiró en el taburete por una fractura de nariz, y en la revancha Márquez fue detenido en el sexto asalto por un Vázquez ensangrentado.

Ambos combates ofrecieron una acción trepidante y sin tregua, interrumpida por finales prematuros, por lo que existía la sensación de que el Vázquez-Márquez III aún podía superar sus ya impresionantes exhibiciones.

Eso es exactamente lo que ocurrió en su tercer combate, en el que se produjo una guerra épica entre los dos nativos de Ciudad de México. Intercambiaron derribos y lucharon con un orgullo feroz a lo largo de doce agotadores y emocionantes asaltos, en los que Vázquez obtuvo el apoyo dividido de los jueces. Fue así como el boxeo mexicano vio cómo se añadía otro capítulo salvaje a sus libros de historia, uno que se distingue de todos los demás.


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2. Jesús Castillo TKO 14 Rubén Olivares – 16 de octubre de 1970:

El primer enfrentamiento Olivares vs Castillo, disputado en el legendario L.A. Forum, rompió la impresionante racha de KO de Puas, aunque Olivares salió victorioso tras mostrarse superior a Castillo.

Pero aquello sólo fue la salva inicial de esta clásica rivalidad mexicana, y las expectativas se dispararon cuando se anunció la revancha.

En el segundo combate entre estos acérrimos enemigos, celebrado en el mismo escenario que el primero y ante un público de más de 16.000 espectadores, el poderoso Olivares sufrió un feo corte en el ojo izquierdo al principio del combate, lo que le dificultó aún más enfrentarse a los puños de su némesis.

Poster de esta gran pelea.

Fue una derrota histórica para Olivares, ya que representó la primera mancha en el currículum del púgil considerado entonces el más grande de todos los boxeadores mexicanos. También representó la cúspide de Chucho: tras fracasar en dos intentos anteriores por hacerse con el oro del peso gallo, por fin se hizo con el título al detener a un temible pegador en un combate infernal, demostrando así su temple y su categoría de grande de México.

 

1. Erik Morales SD 12 Marco Antonio Barrera – 19 de febrero de 2000

En lo que se refiere a peleas totalmente mexicanas, los aficionados nunca lo tuvieron mejor. En el Mandalay Bay de Las Vegas, dos feroces guerreros se enfrentaron en un combate de unificación de peso supergallo que marcó el comienzo de la era de los Cuatro Fabulosos. Morales traía un récord invicto, así como impresionantes victorias sobre Daniel Zaragoza, Wayne McCullough y el mismo Junior Jones que había derrotado dos veces a Barrera.

El «Asesino con cara de niño», a pesar de sus derrotas ante Jones, quería demostrar que era tan bueno como el joven Morales; los corredores de apuestas no estaban de acuerdo, y algunos llegaron a ponerle 5 a 1 en contra en su primer enfrentamiento con «El Terrible».

Huelga decir que Barrera vs Morales I estuvo más que a la altura de su considerable bombo, ofreciendo una acción alimentada por el rencor desde el campanazo inicial y cambios de ímpetu prácticamente en cada asalto.

La violencia alcanzó su punto álgido en un salvaje quinto asalto que le valió el premio al mejor asalto del año. También surgió la polémica, con Barrera ganándose un dudoso derribo en un dramático último asalto.

Al final, las ajustadas tarjetas de puntuación otorgaron una decisión dividida a «El Terrible» cuando la mayoría de los observadores creían que Barrera lo merecía más.

El primer enfrentamiento entre Barrera y Morales es un verdadero clásico del boxeo, considerado por muchos como uno de los combates más feroces jamás disputados. 


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