Controversial empate favoreció a Jessica McCaskill.
En una batalla por los títulos de peso welter de la AMB, OIB, CMB, OMB, Sandy Ryan (6-1-1, 2 KOs) pensó que había ganado la pelea, pero la contienda con Jessica McCaskill (12-3-1, 5 KOs) terminó con un cuestionable empate dividido a diez asaltos.
Las puntuaciones fueron 97-93 para McCaskill, 96-94 para Ryan y 95-95 para el empate.
McCaskill venía de perder por decisión en diez asaltos ante la campeona indiscutible del peso welter júnior, Chantelle Cameron.
Tras un primer asalto de tanteo, Ryan boxeó y golpeó muy bien en el segundo. En el tercero, McCaskill volvió a la carga con duros golpes a la cabeza y al cuerpo.
Ryan conectó combinaciones de golpes muy vendidas, pero su nariz empezó a sangrar por un contragolpe.
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Cameron volvió a la carga en el cuarto, contraatacando bien cuando McCaskill arremetía con golpes. Más de lo mismo en el quinto, con Ryan superando a McCaskill en el boxeo y haciéndola fallar. En el sexto hubo un toma y daca, con ventaja para Ryan.
Durante el séptimo, se produjeron algunos intercambios fuertes, con McCaskill pareciendo herida en el cuerpo en más de una ocasión.
Después de un reñido octavo, intercambiaron golpes a corta distancia durante la mayor parte del noveno. Ryan pareció cerrarse con fuerza en el décimo con los golpes aterrizados.
Esta decisión controversial podría motiva a cualquier de los organismos a ordenar la revancha directa con Ryan.
McCaskill capturó los cinturones del peso welter venciendo a la noruega-colombiana Cecilia Braekhus, incluso en el combate de revancha y también bajó de división para intentar conquistar la faja superligero frente a Chantelle Cameron perdiendo por abrumadora decisión.
Controversial empate favoreció a Jessica McCaskill.
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