«Mantequilla» Nápoles entre los mejores welters de la historia

«Mantequilla» Nápoles entre los mejores welters de la historia.

Lee Wylie.

Cuando José Nápoles falleció en 2019, el mundo del boxeo se detuvo para lamentar la pérdida de un boxeador verdaderamente grande, uno de los mejores campeones de peso welter de todos los tiempos.

Todos en el mundo del boxeo reconocieron el talento raro de Nápoles y su habilidad única para boxear con eficiencia mortal y una gracia poco común.

De hecho, su estilo sofisticado le ganó el apodo de «Mantequilla», haciendo referencia a sus movimientos suaves y refinados en el ring.

Nápoles (81-7, 54 KOs) nació en Santiago de Cuba el día de hoy en 1940 y es ampliamente considerado como el más grande boxeador profesional de su país natal, habiendo reinado en dos ocasiones como el campeón mundial indiscutido de peso welter.

Se convirtió en profesional en 1958 y luchó en sus primeros 21 combates en Cuba, antes de abandonar su nación natal después de que Fidel Castro prohibiera el boxeo profesional.

«Mantequilla» ante Curtis Cokes.

Nápoles vivió el resto de su vida en México, donde, después de ganar el título de peso welter a Curtis Cokes en 1969, su país adoptivo le concedió la ciudadanía plena.

Pero debe destacarse que el ex campeón de peso ligero decidió competir en 147 libras no porque ya no pudiera hacer 135, sino porque su talento y peligrosidad eran tales que simplemente no podía conseguir peleas en categorías de peso más bajas.

Cualquier discusión seria sobre los verdaderos grandes campeones de peso welter debe incluir a ‘Mantequilla’, tan dotado pugilista como el boxeo haya visto jamás.

Su movimiento fluido, su astuta utilización de los ángulos y su poder demoledor lo hacían virtualmente invencible en peso ligero.

Monzon y Stracey, sus victimarios

En el peso welter, Nápoles sumó catorce victorias por el campeonato antes de que sus derrotas ante Carlos Monzón y John Stracey lo llevaran a retirarse.

En su punto técnico más alto, la habilidad del boxeo se trata de hacer que el ataque y la defensa se fusionen en un solo acto atlético sin costuras, y pocos han sido mejores en esto que José Nápoles.

En«Agresión Artística»el legendario «Mantequilla,» quien consiguió cincuenta y cuatro nocauts en ochenta victorias, combinó la defensa y el ataque de una manera verdaderamente artística para convertirse en uno de los más grandes de todos los tiempos, sin lugar a dudas, uno de los mejores en 147 libras.

Su apodo hacía referencia a la suavidad de sus movimientos y a su actitud relajada en el ring, pero el sobrenombre oculta el hecho de que Nápoles poseía un poder demoledor y unos instintos de finalización implacables.»